Instrucciones eróticas:
Tu amante se coloca sobre ti y te penetra adoptando la clásica postura del misionero, pero entonces... ¡zas!, él empieza a hacer un giro de 360 grados manteniendo el pene siempre dentro de ti. Mientras él gira y te embiste al mismo tiempo, ayúdale a moverse sobre tu cuerpo para que lo haga de la misma manera que la hélice de un helicóptero. En esta postura sexual asegúrate de levantarle las piernas cuando las pase por encima de tu cabeza.
Por qué te va a encantar:
Cuando os decidáis a embarcaros en este alucinante viaje de 360 grados, os sentiréis como dinamos sexuales, ¡y tal vez queráis repetir el giro dos, tres y cuatro veces! Otra ventaja de esta delicia del mundo al revés es que, mientras él gire, tú podrás observar hasta el último centímetro de su cuerpo y apenas tendrás que moverte para cosechar grandes recompensas: ¡tu príncipe de la hélice hará todo el trabajo!
Truco sexual
Tal vez os resulte complicado mantener la sincronía. Si en algún momento de su retorcido viaje el proceso empieza a parecerte incómodo y te da la sensación de que él puede salirse, ponte un cojín debajo del trasero para elevar un poco tu pelvis y facilitarle el acceso.
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